En los claros que el bosque de coníferas deja entrever, se divisan los paisajes entre la niebla .
En el camino se encuentra la Fuente de los Alimentos, en un paisaje de suelo de rodeno, que filtra lévemente el agua que la madre tierra absorbe. Su nombre viene de que cuanto más bebe uno de ella, más ganas de comer entran, aunque también, siendo un agua fuerte, puede dar dolor de estómago si se pasa uno bebiendo.
Subiendo el monte, la humedad se vislumbra en su suelo de líquenes y verdes musgos.
Casi en lo alto encontramos la cruz conmemorativa del avión que se estrelló en 1959, en el que iba el gimnasta español Joaquín Blume, falleciendo en dicho accidente junto a toda la tripulación y pasajeros
Desde lo alto del pico, a 1835 metros de altura, en un momento que el sol deja un guiño sobre la tierra, entre la niebla asoma el paisaje que se divisa desde la altura.
Por su itinerario, el bosque se pinta de amarillos, lilas, azules y morados en un día primaveral brumoso y lluvioso.